Con unos simples trucos, es fácil hacerse rizos para el día a día. Ni siquiera tienes que levantarte súper temprano. ¿De verdad? Sí, te lo demostramos con estos consejos.
Con rizadores eléctricos o planchas, cualquiera puede tener unos rizos perfectos, incluso si tu pelo es liso por naturaleza. Los resultados merecen la pena, incluso si tienes que invertir un poco más de tiempo en peinarte. No nos preocupa en las ocasiones especiales, pero la mayoría de mujeres prefieren un esfuerzo mínimo para el día a día. Normalmente, las mañanas no permiten sesiones de peinado muy largas. ¿Pelo rizado con el mínimo esfuerzo? Claro, con estos simples trucos:
Lávate el pelo con shampoo y acondicionador la noche de antes, reparte una porción de espuma y déjalo secar un poco. Hazte varias trenzas y átalas con gomas. Sécalo con el secador a baja potencia, hasta que los mechones trenzados estén casi secos. Deshaz las trenzas a la mañana siguiente y sepáralas con los dedos. Aplica laca para una fijación adicional y como toque final. ¡Rizos fáciles listos!
Para crear ondas playeras de forma fácil, lávate el pelo por la noche, usa un spray texturizante y sécalo con el secador hasta que esté prácticamente seco del todo. Hazte una raya en medio y divide el pelo en dos secciones. Enrolla cada parte y hazte un moño. También puedes recoger todo el pelo en un solo moño. Suéltalo por la mañana y separa los rizos desde las raíces, dales forma y fíjalos con laca.
El pelo largo es relativamente fácil de ondular con una plancha. Primero aplica un spray protector de calor en el pelo, como por ejemplo Guardian Angel de Got2b. Enrolla un mechón alrededor de las placas de la plancha y mantenlos unos 5 segundos antes de pasar al siguiente mechón. Para un acabado natural, peina los rizos con cuidado. Para una sujeción extra, usa un gel fijador como Glued de Got2b.
Cuando tienes el pelo corto, es difícil usar una plancha, hacerte trenzas o hacerte un moño. Pero esto no significa que no puedas conseguir ondas o rizos: simplemente enrolla mechones de cabello después de lavártelo y sujétalos con horquillas. Sécalos con el secador o déjalos secar al aire antes de soltártelos de nuevo. Péinate con los dedos y fija el peinado con laca o cera.