De media, perdemos unos 100 cabellos al día. Puede sonar exagerado pero es perfectamente normal. Sin embargo, si esta cifra crece significativamente durante mucho tiempo, se conoce como pérdida del cabello y deberíamos pensar qué la está causando. Hay muchas teorías sobre por qué ocurre: embarazo, dietas, cepillarse demasiado y el estrés son los sospechosos comunes. ¿Pero qué hay de cierto en estas teorías?
Al igual que la piel, nuestro cabello refleja lo que está pasando en nuestras vidas y nuestras emociones. Cuando estamos bajo un estrés significativo, el pelo sufre con nosotros, se vuelve menos brillante y más quebradizo, y pierde vitalidad. Si el estrés continúa durante mucho tiempo, de manera que las hormonas no puedan volver a sus niveles normales, esto puede afectar a los folículos pilosos, impidiendo el crecimiento normal del cabello y en algunos casos causando la caída, en toda la cabeza o en zonas circulares. Esto puede pasar incluso meses después de que el estrés finalice.
En cuanto los niveles de estrés disminuyen, la caída del cabello debería verse reducida. Así que parece fácil: necesitas identificar qué está causando el estrés para tratar de evitarlo. Una manera de intentarlo es llevando un estilo de vida saludable y dormir lo suficiente, para que tu cuerpo pueda recuperarse de un día ajetreado. El yoga, por ejemplo, que usa la relajación natural del cuerpo, puede ayudar a reducir el estrés. Pero sé paciente: el ciclo de crecimiento del pelo es bastante lento y pueden pasar varios meses hasta que veas verdaderas mejoras. Durante este tiempo, los productos capilares que aportan volumen pueden disimular la pérdida. Truco: estimula las raíces mientras te lo lavas con shampoo, masajeándolas bien. Te recomendamos la gama Biotina+ Aceite de Aguacate de Pert, esta fórmula exclusiva contribuyen a reparar el cabello maltratado y a estimular su crecimiento natural, ayudándolo a crecer hasta 6 cms en 6 meses*.
* Con base a información teórica de crecimiento promedio del cabello humano.